Sacaleches

Sacaleches

Filtros clear

Filtrar por

Marcas
más... menos
Precio
Rango: 7 - 265

Hay 13 productos.

Mostrando 1-13 de 13 artículo(s)

SUAVINEX EXTRACTOR LECHE ELÉCTRICO LINK

Extractor eléctrico Suavinex, proporciona un bombeo automático que extrae la leche materna de forma rápida y sencilla. Imita el ritmo de succión del bebé. Testado por madres reales. Ideal para la extracción periódica de leche materna, sin tener que presionar manualmente.

Precio 98,99 €

Sacaleches materno

Un sacaleches es una de las herramientas más cómodas para una madre. Ya sea manual o eléctrico permite seguirle dando leche materna a nuestro bebé aunque no por causas naturales o preferencias, no podamos darle el pecho. Actualmente existe un amplio abanico de sacaleches, pero no te preocupes. Te dejamos una guía para que no te resulte abrumador junto a nuestro magnífico catálogo cuidadosamente seleccionado.

¿Manual o eléctrico?

Es la gran división que existe actualmente en el mercado. Los sacaleches eléctricos son una incorporación relativamente reciente al mercado, naciendo en los hospitales como ayuda para madres primerizas. Desde entonces se han reducido mucho en tamaño. ¿Cual es mejor? Cada uno tiene sus propias ventajas, te damos un vistazo a sus principales diferencias.

Sacaleches manual

Los sacaleches manuales son los clásicos. Mediante una válvula se simula la succión del bebé y se acumula dentro del recipiente, que puede ser el propio biberón. Su principal ventaja es la durabilidad y el precio; con un cuidado adecuado es difícil que la válvula sufra alguna rotura, por lo que sólo sufrirá el desgaste habitual por el uso. Por otro lado, será mucho más sencillo de limpiar, ya que al no tener componentes electrónicos, su limpieza es única con lo que ahorraremos tiempo. Y esa misma falta de componentes electrónicos es lo que les hace más baratos, aunque en general el mercado ha llegado a un punto de accesibilidad en que el precio no debería ser un condicionante.

Sacaleches eléctrico

Su principal ventaja es, sorpresa, ser eléctrico. Es muy recomendable para madres que, por los motivos que sean, no pueden dar el pecho a sus hijos desde el principio. Como no tiene que ser accionado de forma manual, evitamos el sobre esfuerzo en una madre que lleve poco tiempo desde el parto. Y aunque no nos encontremos en esa situación, si queremos rellenar varios recipientes de leche, castigaremos mucho el agarre de la mano; por lo que o bien no podremos hacerlo, tendrán que hacerlo por nosotros o nos cansaremos en exceso. En cualquiera de ellos, un sacaleches eléctrico es mejor opción. Por contra, su motor eléctrico hace que sea más pesado y se tenga que manipular y limpiar por partes, algo que puede no ser del agrado de todos.

¿Qué biberón debo usar con mi sacaleches?

Una de las principales preocupaciones de los padres es si serán compatibles los diferentes biberones con el sacaleches. Varias puntos son importantes. El primero es que efectivamente existen sacaleches que permiten que sea directamente vertida para que el bebé pueda tomarla. Incluso se puede almacenar en los propios biberones. En esos casos, normalmente los sacaleches solo son válidos para los propios biberones de la marca. Ya que las tetinas y sus roscas, se encuentran adaptadas a la válvula del sacaleches. Como suele pasar con los calienta biberones.

Recipientes de leche adicionales

Sin embargo, muchos sacaleches admiten recipientes especiales, no necesariamente biberones, que pueden ser usados luego para trasvasar la leche. De esa manera se consigue sortear el escollo de los biberones adaptados. Como los sacaleches se suelen usar con recipientes propios o universales tendremos que ponderar la  facilidad de conseguir repuestos o ampliarlos. De todos modos, el proceso normal es ir rellenando biberones teniendo siempre una reserva en los recipientes, por lo que no debería ser problema salvo que necesitamos rellenar muchos botes; como puede ser el caso de las madres que producen mucha leche.

Partes y recambios de sacaleches. Que no y si puedo esterilizar

Los sacaleches son susceptibles a rotura. Tanto los eléctricos como los manuales. Conocer sus partes te ayudará a saber como solucionar averías menores, ya que es posible que un recambio te ahorre la necesidad de comprar uno nuevo. También te indicaremos si debe ser esterilizado o no

Motor: No debemos esterilizarlo

El motor es clave, ya que con su velocidad y forma de extracción optimizaremos la cantidad de leche obtenida. Además evitará que podamos sufrir lesiones. En general lo más óptimo es elegir un motor que tenga dos velocidades, de esa forma podremos imitar la succión del bebé. Si el motor solo tuviera una, nuestro pezón se estiraria continuamente, lo que favorecerá la formación de grietas. En caso de romperse, es posible comprar recambios de motor sueltos si el modelos los admite, ya que pueden ir integrados con la estructura del sacaleches y ser necesario conocimientos técnicos.

Tubo: Sí, debemos esterilizarlo si entra en contacto con la leche

El tubo conecta la copa con el colector. Normalmente suele ser de tamaño único, ya que las copas comparten anchura al final. Sin embargo, si la copa se encuentra, incluso al final, totalmente adaptada al tamaño del pezón; tendremos que recurrir a adaptadores. En general, aun siendo resistentes, el tiempo y un mal cuidado puede provocar roturas y pérdidas de leche. Recuerda que debes limpiarlos habitualmente  y asegurarte que se secan de forma adecuada.

Copa: Sí, debemos esterilizarlo

La copa es la parte clave de cualquier sacaleches. Ya que debe adaptarse al seno materno. Una mala elección de copa suele ser la principal causa de grietas y dolor en el pezón. La anchura de la base del pezón debe ser ligeramente superior al de la boca de la copa, ya que permitirá un movimiento de doble succión adecuado, sin que roce con las paredes del tubo ni que permita que la areola entre dentro del tubo. En caso de rotura, es fácil encontrar repuestos sueltos y es habitual que vengan incluidos varios en cada paquete. Como consejo, si no está segura de cuál sería tu anchura de copa, puedes probar varias del rango medio. Aunque con una simple mención básica de la anchura del pezón debería ser suficiente.

Membrana: Sí, debemos esterilizarlo

La membrana impide que entre el aire y cuerpos extraños en el collector. Dado que se encuentra en contacto con la leche, debe esterilizarse de forma periódica, con un hervido corto será suficiente. Además, el tiempo desgastará de forma natural la membrana, cosa que podremos saber simplemente con el tacto.

Válvula: Sí, debemos esterilizarlo

La válvula actúa de forma conjunta con la membrana. Ya que la sostiene. Conforme pase el tiempo y los usos, irá perdiendo eficacia ya sea a la hora de alojar otras membrana o de mantenerse sujeta a la parte baja del colector. Dado que entra en contacto con la leche, debemos esterilizar de forma periódica; proceso que también acelera su desgaste, aunque es muy necesario.

Botella y colector: Sí, debemos esterilizarlo

En el colector y botella acumularemos la leche. Evidentemente necesitaremos varios respuestos sobre todo si queremos usarlos como almacenadores si, por ejemplo, no tenemos suficientes biberones. Por otro lado, necesitaremos varios si queremos almacenar distintas cantidades de leche, como para un viaje. Deberemos tener en cuenta si el sacaleches acepta botellas universales o deben ser una marca concreta.

Talla de copa de un sacaleches

Lo comentamos más arriba. El tamaño de la copa del sacaleches depende del pezón. La forma más sencilla, a parte del ensayo y error, para identificarlo es midiendo la base. De esa manera sabremos la anchura en milímetros. Y siempre deberemos elegir una ligeramente superior. De esa forma el pezón podrá estirarse y contraerse, haciendo vacío de forma efectiva. Una copa pequeña, provocará rozaduras y lesiones. Una demasiado grande, favorecerá que parte de la areola sea introducida con el pezón, reduciendo la capacidad de succión. Por otro lado, el tamaño de nuestros senos y pezones puede variar a lo largo de la lactancia del bebé, por lo que ante problemas de succión deberemos siempre cambiar la copa por una más adecuada.

Copas masajeadoras extras

Incluso aunque elijamos la copa del tamaño adecuado si realizamos un uso intenso o tenemos los senos sensibles podremos sufrir molestias. En ese caso tendremos que recurrir a una copa masajeadora. De esa forma la succión, que aunque sea de dos velocidades generalmente no podremos controlar, no provocará daños en el seno o los mitigará bastante. Pero recuerda que en caso de persistir los dolores deberás consultarlo con el pediatra.

¿Cada cuanto debo usar un sacaleches?

Depende del nivel de producción de leche o de nuestras necesidades. Como la cantidad que generamos es reducida, tendremos que calcular cuanto nos lleva llenar una toma media (medida que por otro lado va variando conforme crece el bebé). Eso nos marcará el ritmo. Por lo que depende de lo que cada mamá necesite.

¿Duele usar un sacaleches?

No. Al menos no más que lo que tu propio bebé usando su boquita puede provocarte. En casos especiales como pezones sensibles existen copas masajeadoras o motores con velocidades de extracción suave. De todos modos, siempre es aconsejable recurrir a un pediatra en esos casos. En el supuesto de grietas en el pezón, usar un sacaleches siempre será menos doloroso a la larga que continuar con la lactancia tradicional ya que podremos controlarlo mejor.

Velocidad de extracción de leche

Todos los sacaleches imitan la succión materna, cosa que se consigue con dos velocidades distintas, para simular los movimientos de los labios y boca del bebé. Puede que necesitemos velocidades más altas que otras mamás pero en general los motores cubren un amplio rango y siempre podemos usar un sacaleches manual.

Estimular la producción de leche materna con un sacaleches

Si sacas poca leche con los primeros usos no te preocupes. Es normal. Sucede porque tu cuerpo se encuentra habituado al ritmo normal de succión de nuestro bebé. Por ejemplo con la presión de sus labios y encías. En ese caso y al hacer la transición al sacaleches, un método efectivo es usarlo varias veces al día. Incluso si conseguimos pocas cantidades. De esa forma, cada hora o dos horas, iremos rellenando un recipiente. Así habituamos a nuestros pechos y podrán ir ganando velocidad a la nueva forma de “succión del bebé”. En caso de persistir la baja velocidad, consulta a un médico especialista.